Oído humano vs oído animal. El campo auditivo humano corresponde a una banda específica de frecuencias y un rango concreto de intensidades. Solo las vibraciones acústicas incluidas dentro de este campo se consideran sonidos.
Oído humano vs oído animal. El oído humano percibe sonidos con frecuencias comprendidas entre los 20 Hz, el tono más bajo, y los 20.000 Hz, el tono más alto. Todos los sonidos por debajo de 20 Hz se califican como infrasonidos, aunque algunos animales, como la rata topo o el elefante, son capaces de escucharlos. Del mismo modo, todos los sonidos por encima de 20.000 Hz se califican como ultrasonidos. Los gatos y los perros pueden percibir ultrasonidos por encima de los 40.000 Hz, el delfín puede llegar a percibir ultrasonidos de hasta 160.000 Hz y el murciélago de hasta 200.000 Hz.
Las palomas captan frecuencias increíblemente bajas que rondan los 0,5 Hz. Esto les ayuda a oír el sonido cuando viajan a grandes distancias y hasta a detectar las condiciones meteorológicas de su trayecto, ya que oyen la lluvia, las tormentas o los truenos.
Perros y gatos, frente a los humanos, tiene una mayor sensibilidad auditiva a las altas frecuencias. Está comprobado que algunos canes escuchan ultrasonidos de hasta 45.000 Hz y los gatos de hasta 64.000 Hz. Esta capacidad de escuchar sonidos tan agudos, imperceptibles para las personas, proviene de la evolución cazadora de estos animales, con el fin de poder localizar pequeños roedores, los cuales emiten sonidos muy agudos.
Oído humano vs oído animal. Además, los perros y los gatos, como animales depredadores, también tienen la necesidad y por tanto la facultad de detectar con gran precisión, no solo los sonidos, sino también la dirección de la que provienen, y por esa razón, los gatos y muchas razas de perros, pueden mover sus orejas y orientarlas en distintas direcciones, incluso de manera individual. Los perros cuentan con 17 músculos para poder mover las orejas mientras que los humanos solo tienen 9.
Pero esa gran capacidad auditiva también hace que los animales sean mucho más sensibles a los ruidos, por ello les afecta sobremanera el estruendo, lo que en muchos de ellos activa sus mecanismos de huida y defensa, o sufren estrés acústico que puede influir negativamente en su comportamiento.
El sonido de un avión al despegar alcanza los 100 decibelios, el disparo de un arma de fuego llega a los 140 decibelios y la explosión de un petardo puede superar los 150 decibelios, en distancias cortas. En este sentido, estos estruendos al ser percibidos por los animales pueden producirles traumatismos en el oído y llegan a desarrollar fobias a los ruidos. Muchas mascotas, especialmente perros y gatos, tiene un gran temor a los truenos o al sonido de los fuegos artificiales.
Por su parte, el oído humano puede captar niveles de intensidad acústica comprendidos entre los 0 dB y los 120 dB. Sin embargo, los sonidos superiores a los 90 dB dañan el oído interno e incluso pueden causar daños irreversibles.
https://www.ecoticias.com/naturaleza/115638/10-animales-audicion-increible
https://misionescuatro.com/general/estas-son-las-diferencias-entre-el-oido-humano-y-animal/
http://www.jrbatalle.com/blog/2014/8/24/diferencias-sensoriales-entre-humanos-y-cnidos
Eva Plaza
Buen post
Muchas gracias por tus comentarios :)